Los imanes avellanados vienen en dos variaciones básicas: avellanadores totalmente magnéticos, que son piezas sólidas de imán, e imanes de olla, que albergan imanes dentro de carcasas de acero.
Los avellanadores totalmente magnéticos tienen dos ventajas:
Por lo general, son un poco más baratos ya que no está pagando la vivienda.
Su campo magnético es generalmente un poco más fuerte porque no hay Barrera (es decir, la carcasa) a su alrededor.
El gran inconveniente de los avellanadores totalmente magnéticos es que son frágiles. En muchos casos, estos avellanadores están hechos de neodimio sólido. Durante la instalación, el sobregolpe de un tornillo puede hacer que El neodimio se agriete, rompiendo el avellanado.
Los imanes de la olla son un poco más fuertes. Gracias a la carcasa metálica, no necesita preocuparse tanto por el manejo, especialmente durante la instalación. Esta cubierta protectora también permite el uso de imanes de ferrita en lugar de neodimio, aunque es una opción menos común.
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